29 septiembre 2009

Tal vez la infancia es más larga que la vida


La frase es de Ana María Matute y la he encontrado en su último libro, Paraíso inhabitado, una novela que retrata con maestría la soledad y el misterio que rodea a la niñez como si te transportara hasta aquellos años, y de la que lo peor es el título, bajo mi punto de vista mediocre y fácil de olvidar, muy por debajo de la altura de la novela.

Recogí esta frase porque a pesar de su aparente sencillez me transmitió la sensación de infinitud del tiempo durante la niñez, las horas y días que van pasando de forma lenta y que parecen no terminar nunca. Además, refleja la marca que deja la infancia vivida durante el resto de la vida.

2 comentarios:

  1. Claro, ella lo dice porque lo sabe, porque lleva ya mucho tiempo en esa fase "creciente(en todos los aspectos)" de la vida... ¡Y abierta siempre a todo, como en la infancia!

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  2. Sí, Chus, el hecho de saberlo y apreciarlo me enternece en una persona que ha vivido tanto, pero sobre todo me alucina el paso del conocimiento a la expresión, es decir, resumir ese sentimiento tan profundo en una frase tan sencilla.

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